En España hemos confundido lo que es ser un político profesional de lo que es ser profesionales con vocación política.
Explicado de una manera muy sencilla. De la misma manera que Vd. no dejaría que alguien que no sea piloto, se ponga a los mandos de una cabina de tripulación de un avión, o de la misma manera que Vd. no dejaría que le hiciese una operación de corazón alguien que no fuera un médico, con especialidad de cirujano, Vd. no debería elegir a representantes que no estén muy bien formados académicamente y que tengan experiencia, pues está si no, llevando a la sociedad a una muerte agónica con tomas de decisiones incorrectas para que se desarrolle una sociedad en paz y armonía, con trabajo, con vivienda, con capacidad de desarrollo vital.